La carboxiterapia es un tratamiento que consiste en la aplicación subcutánea de dióxido de carbono (CO2) a través de microinfiltraciones. Esta terapia tiene como objetivo mejorar la circulación sanguínea, estimular la producción de colágeno, elastina, y promover la eliminación de grasa localizada y celulitis.
Dónde se aplica
La carboxiterapia se puede aplicar en diversas zonas del cuerpo como: abdomen, muslos, glúteos, brazos, piernas, rostro y cuello. Es especialmente efectiva para tratar: celulitis, flacidez cutánea, estrías, ojeras y grasa localizada.
Cuánto dura el tratamiento
Los resultados de la carboxiterapia suelen ser visibles después de unas pocas sesiones, aunque puede variar según la condición tratada y las necesidades individuales del paciente. Por lo general, se observa una mejora gradual en la textura de la piel, reducción de celulitis y flacidez, logrando una apariencia general más firme y tonificada. Es importante seguir el plan de tratamiento recomendado para obtener los mejores resultados.